En el ocaso del día, agotadas las fuerzas, caminamos mirando casi siempre al suelo.
Quizá, si levantáramos más a menudo los ojos... Aunque fuera un momento...
Música, libros, fotos, cosas que me pasan, que recuerdo, que se me ocurren, ficciones, viajes y qué sé yo cuántas cosas más...
Quizá, si levantáramos más a menudo los ojos... Aunque fuera un momento...
Algo sobre la noche, sobre el agua, la luz, el reflejo, los sillares de piedra...
Al fin, no se me ocurre nada. Pero no importa. En realidad, tampoco necesita ninguna historia.
La imagen «es» historia.
Evidentemente, no voy a encontrar música mejor para acompañar los acontecimientos de todos conocidos: la reciente intrusión en nuestros domicilios de tres personajes coronados sin orden judicial.
La Casación en sol mayor de Leopold Mozart. O, lo que es lo mismo...
La Sinfonía de los juguetes.